El IG o el Índice Glucémico es una manera de medir qué tan rápido y en qué medida ciertos alimentos elevan tu nivel de azúcar en la sangre. El índice va del 0 al 100. Nuestro cuerpo descompone los alimentos altos en IG (mayores de 70 en la escala) de manera muy rápida, elevando el nivel de azúcar en la sangre. Por el contrario, los alimentos bajos en IG (debajo de 55) son más difíciles de digerir y se absorben lentamente en el sistema sanguíneo, haciendo que el nivel de azúcar en la sangre se mantenga estable, duradero y que además tu cuerpo no tenga necesidad de producir tanta insulina.
¿POR QUÉ SON MALOS LOS ALIMENTOS ALTOS EN IG?
¿QUÉ PUEDES COMER?
Una dieta baja en IG no es del todo clara. Muchos de los alimentos altos en azúcar o grasas tienen un IG bajo – como la pizza, por ejemplo – pero eso no quiere decir que sea buena para ti. Esto significa que no puedes olvidar el concepto de las calorías por completo. No obstante, tienes que seguir considerando el valor nutricional y mantener las porciones en mente.
La manera en que los alimentos son procesados, preparados y servidos también puede impactar en el índice de IG. Por ejemplo, los frutos rojos tienen un IG más alto que los verdes, la pasta demasiado cocida es más alta que una al dente – y así podemos seguir…
También es importante que pienses la manera en la que combinas tus alimentos. Un buen tip es mezclar los alimentos altos en proteínas con carbohidratos de granos enteros, pues así las proteínas alentaran la absorción de los carbohidratos.
Y – por supuesto – ¡tienes que ejercitarte! Ninguna dieta niega necesitar el ejercicio aeróbico varias veces a la semana.