1. BASE
Primero aplica una BB cream o una base de maquillaje ligera para disimular cualquier irregularidad en el tono de tu piel – la idea no es cubrir, sino resaltar el color natural de tu piel.
2. ILUMINA
Aplica un poco de sombra de ojos en tono neutral sobre tus párpados superiores; manteniéndola ligera, pues querrás centrar la atención en tus ojos, pero no en el maquillaje que está alrededor de ellos.
3. DEFINE TUS OJOS
Usa un delineador café para delinear tus líneas de agua superiores e inferiores. Después, usa el mismo delineador para añadir definición y profundidad en el pliegue de tus ojos – no apliques demasiado, ¡recuerda que quieres lucir natural! Finaliza con un poco de máscara, opta por una fórmula que alargue, defina y tenga un acabado discreto.
4. RUBOR
Ahora dale a tus mejillas un color rosado natural. Utiliza una brocha media para difuminar blush sobre tus mejillas, aplícalo en línea diagonal desde la altura de tus orejas, con dirección a tu nariz. Aplica poco producto para evitar que se vean líneas angulares y plastas.
5. LABIOS
Finaliza aplicando un lipstick con textura cremosa en un tono natural.
